Lo besó por treinta monedas - en la boca - y se quedó remoliéndose por lanoche por haber traicionado sus principios.
Aportado por Francisco Pascoal Pinto/ São Paulo Brasil
jueves, agosto 10, 2006
Levado a usted por microcuentos a la/s 7:12 a. m.
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1 comentario:
Si la traición desencadena hechos como lo ocurrido por treinta monedas, quizá es justificable..o terriblemente condenable. Siempre dependerá del punto de vista de cada persona.
Saludos
Pablo
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